Tuesday, September 13, 2011

La democracia no es buenas intenciones solamente, Sr. Allende (post mortem)


Los ignorantes (o sea, que no saben, no que sean brutos) y la gente de buena fe y aún los que defienden a personajes como Allende confunden moralidad con historia.

Y no se dan cuenta que ellos mismos bajo un régimen como el de Allende, Chavez o Fidel a la larga  terminan 
en la lista de sus enemigos. Son gente de buenas intenciones y piensan en grandes ideales, "democracia", "igualdad", etc., pero no son prácticos y no pueden ver como esos mismos lideres que admiran usan la democracia para destruir la democracia, la libertad para acabar con la libertad.

Por eso no pueden distinguir entre una dictadura motivada por necesidad histórica y una dictadura motivada por ambición personal al poder por el poder mismo.

Fue la izquierda misma, como en otras ocasiones historicas ha ocurrido, la que motivó y provocó el derrocamiento de Allende con su insistencia en violar y atropellar la constitución democrática misma que tanto sus defensores dicen que amaba por haber sido democraticamente electo.

A Allende le importó un bledo la democracia cuando por voto de 81 a 47 el congreso, los representantes tambien electos por el pueblo, condenó las violaciones constitucionales de Allende y demandó que cesara de inmediato en esas violaciones. No lo hizo. En 1973 la Corte Suprema de Chile denunció la destrucción de la legalidad gubernamental, de la separación de poderes, por parte de Allende al no obedecer y sostener las decisiones judiciales de la Corte Suprema.

Allende volvió a hacer caso omiso a la separación de poderes cuando insistió en 1973 en hacer un plebiscito por fuera de la constitución para pasarle por encima a las ramas judiciales y legislativas y sus demandas constitucionales y atrincherarse en el poder y seguir gobernando por decreto. En otras palabras, Allende era otro Zelaya, bajo la influencia de Fidel y la KGB.

Pero los que tanto cacarean de que Allende fue democraticamente electo, no quieren ver esto, como si haberlo sido era licencia para acabar con la democracia en Chile. Esta historia es irrefutable, y el que no pueda entenderlo es por obstinancia, o no puede ver lo que ha sucedido en Venezuela, o es que simpatiza con esos tipos de "democracia".

La democracia no es buenas intenciones solamente, sino el respeto a sus instituciones.

Allende vino y se fue, Pinochet vino y se fue.  Apoyada moralmente por la academia y por las mismas gentes que aman gobernantes electos democráticamente, todavia tenemos en Cuba la única y verdadera, y más larga dictadura militar de todos los tiempos en este hemisferio.